Este año en la
República Argentina se estarán celebrando elecciones legislativas. Y como
siempre ya empezó la campaña electoral.
Nos dispondremos
a analizar brevemente cuál es el papel de la comunicación en estas elecciones. Y
que es más importante, el aparato de difusión que se posea o, las ideas y
propuestas políticas.
Visitando las
webs de los partidos políticos (los que la tenían, claro está) que se
presentarán en las próximas elecciones, todas comparten un denominador común,
ninguna muestra de manera clara un proyecto de ley o de propuesta política.
Algunos partidos simplemente se presentan como “oposición a” pero sin mostrar,
al menos hasta ahora, alternativas políticas. Esta misma tendencia se mantiene también
en los distintos spots radiales y televisivos.
Vemos entonces
como las elecciones son movidas por los sentimientos de empatía hacia un
candidato o partido que por la creencia en un proyecto político o en las ideas
que presentan, mas en un país en donde la herramienta del debate es escasamente
utilizada, como es el caso argentino.
Hay, entonces,
dos patas fundamentales para tener éxito en las elecciones. Una, es el
candidato fuerte de la lista que debe ser una figura con peso específico y debe
transmitir carisma. Y la segunda pata, y no menos importante, es la
comunicación.
Esto hace que los
comunicadores y asesores de imagen (que en definitiva son, en general, los que
“construyen” los candidatos) que intervienen en las campañas cumplan un papel
protagónico. El futuro electoral de los políticos parece no estar atado a las
ideas que representan, sino a que tan bien se desempeñe su equipo de
comunicación durante el proceso electoral y que tanto dinero se pueda invertir en comunicación.
Si la
comunicación es buena (y el presupuesto es holgado) el éxito en las elecciones estará casi asegurado, sin importar el
partido o las ideas que represente. En definitiva, los comunicadores terminan
cumpliendo un papel principal en el futuro del país. Algo que se debe afrontar
con responsabilidad y ética para responder de manera acorde a tamaña
responsabilidad.
Gerardo Nigro
MeLóN Comunicaciones